QUIZÁS

Muy poquito tiempo, un cierre de año, una boda, muchas prisas, y muy poquitas ganas de pensar en la lógica de mis actos, en el bien y en el mal, en todos y en nadie.
Simplemente no quiero que quede en portada un post como el anterior, en el que digo que me siento triste.
Porque la realidad es que no tengo tiempo ni ganas de sentirme nada.
A veces levitar por la realidad es lo mejor que te puede pasar.
Y yo sigo riéndome la mayor parte del día.

He visto por fin In the Mood for Love (Deseando Amar). No he encontrado ningún enlace que me convenza, pero ahí está Google. La recomiendo, aunque los que sólo soporten películas redondas de introducción, nudo y desenlace, mejor que se olviden de ella. Es una peli para navegar entre las brumas de lo dicho, lo callado, lo intuido. Y para deslizarse por otro tipo de belleza.

Y a buscar un poco de calor entre tanta lluvia, entre tanta nieve y entre tanto frío.