9.19.2005

PARECEN CINCO, PERO SON MÁS

(B-W) Él se ha levantado pronto. Está muy cansado y dolorido, pero hace un esfuerzo por meterse en la ducha y comer algo, porque sabe que tiene que hacerlo. Le espera un día largo y duro. Un día que se parece a todos los días. Cuando entra en su coche, apoya las manos sobre el volante. Sonríe. Se le ilumina la cara. El color negro de sus uñas le recuerda algunos abrazos.

(B) Ella llega a casa a comer. Mira los rincones de su casa, despacio y minuciosamente. De pronto se le hace vacía y silenciosa. Sabe que tardará unos días en acostumbrarse al silencio habitual, y que no encontrará algunas cosas, porque alguno de sus invitados las han cambiado de sitio. Al alzar la mano para colocar sus platos intentando que no se le caiga ninguno, se la mira atentamente. El color granate de sus uñas le recuerda algunas risas.

(V) Ella ha corrido mucho. Ayer se acostó tarde por la emoción del reencuentro con su novio y hoy llega tarde. Le ha contado atropelladamente todo, pero le ha costado por el cúmulo de sensaciones que se le agolpaban en la garganta. Además no sabe cómo contarle que ha tomado una hermosa decisión. Cuando se apoya en la puerta del portal para abrirla, se le hace extraña su propia mano. El color negro de sus uñas le recuerda algunas miradas.

(N) Ella está sentada en el avión de vuelta. Vestida toda de negro menos sus ojos y sus labios. Mira por la ventanilla. Saca su cámara para recuperar algunos recuerdos y completar el recorrido visual de dos días y tres noches de encuentros y de charlas. Piensa que ha merecido la pena. Al apretar uno de los botones de su cámara, se mira las manos con esa sonrisa beatífica que esconde el torbellino. El color negro de sus uñas le recuerda algunas palabras.

(G.) Yo estoy sentada delante del ordenador. Intento digerir, pero me cuesta. Se que tendrán que pasar un par de días. Como siempre. Pero al mirar mis manos sobre las teclas una lenta sonrisa se hace inevitable. El color granate de mis uñas me recuerda que no estoy sola.
Aunque ya lo sabía.

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